SE LAVÓ LAS MANOS

Cuando escuchamos decir “Se lavó las manos”, lo primero que nos viene a la mente es la sensación de abandono y hasta traición de quien esperábamos interviniera, prestara un apoyo o el acompañamiento íntegro ante una situación en particular y ciertamente se trata de una acción inesperada de quien pensábamos que teniendo algún compromiso o respuesta ante una circunstancia especifica que no era de nuestra total responsabilidad, decidió evadirla y dejarla para que otra persona asumiera las consecuencias de aquello. De este tipo de conductas sabemos que podemos hacer un listado de seres que por falta de valores especialmente el de la responsabilidad, pensaron que siendo más habilidosos podían escabullirse cual escapista y dejar a la deriva algo que le correspondía o algo por lo cual se comprometieron. Sin embargo este tipo de personas no deben afectar nuestro equilibrio emocional, pues simplemente nos demuestran con sus acciones que no son personas que merecían de nuestra confianza y de nuestro interés en acompañarles. Por ello lo importante de recibir con alegría y no con tristeza la huida de quien demostró no ser de fiar. Lavarse las manos es un acto desleal hacia quienes decidimos depositar nuestra confianza en ellos. No por ello debemos asumir una actitud cerrada y desconfiada del resto de las personas que nos rodean o que por alguna razón se acercan a nuestro entorno, pues el equilibrio del Universo es tan perfecto que a las personas que actuamos de buena fe, con valores consolidados en la buena voluntad y el deseo de asumir con responsabilidad nuestras tareas, siempre vamos a tener la oportunidad divina de ver ir a quienes no proporcionarían un valor positivo a nuestras vidas y simplemente el repelente de nuestra esencia alejó a esa plaga que quiso aprovecharse de nuestra buena voluntad. Queridos y apreciados lectores, no hace falta quien se va, lo importantes es quien llega a potenciar nuestra vida. Debemos entender que existen personas astutas que nos abordan con bonitas palabras y hasta nos prometen cosas maravillosas sólo con en interés de tomar ventaja de una situación y hasta de aprovecharse de nuestra forma de ser “Me uso y se fue”, “Me dijo que me amaba y mostró lo contrario”, “Me prometió que me ayudaría y al final prefirió dejarme en visto”. Posiblemente al leer estas expresiones nos recordamos de uno que otro caso en el cual fuimos testigos al vivirlo, bueno allí estuvieron personas que al final mostraron que eran evasoras de responsabilidades, evasoras de compromisos, evasoras de lealtad y por ello lo bueno de que con sus lavadas de manos salieron de nuestras vidas, pues ellas simplemente contaminaban el ambiente y no eran el terreno fértil para sembrar las semillas de nuestra confianza. La palabra vale y tiene un peso valioso cuando hacemos de ella desde el corazón la fortaleza de cumplirla pase lo que pase, sólo por el hecho que decidimos cumplir con lo que ofrecimos, cumplir con lo que nos correspondía, cumplimos con quien esperaba la respuesta que aseguramos brindar.

Héctor Baptista, Facilitador para crear Pensamientos Reforzadores de Vida. Sígueme por Instagram y Facebook a través de @mensajesdelcorazonhb Asesorías y Orientaciones a través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com