DECIDÍ
VIVIR EN VEZ DE SER UNO MÁS DEL MONTÓN
Cuando les
préstamos mayor atención aquellas cosas o momentos que no son de nuestro agrado,
con ello realmente logramos darle más fuerza. No es cuestión de vivir en un
mundo paralelo evitando aceptar aquellas realidades que se manifiestan a su
manera en nuestro entorno de forma directa o indirectamente. Lo que deseo
compartir es que si nos enfocamos en las cosas que no son de nuestro gusto
finalmente serán ellas las que tendremos en contacto directo y permanente. No olvidemos
que somos imanes de lo que pensamos y manifestamos a través de nuestras
emociones. Si somos de las personas que están pendientes de ver sólo las nubes
oscuras seguramente no buscaremos apreciar aquellos lugares que se muestran despejados
simplemente porque nos condicionamos a sintonizar sólo momentos tempestuosos. Como
seres humanos nos habituamos a patrones y conductas, muchas veces hasta tomamos
prestadas estas actitudes por el entorno donde crecemos o nos desarrollamos,
por ejemplo si en nuestro hogar la tendencia es andar criticando al vecino
asumiremos una vida desde la crítica, si en nuestro trabajo nos desenvolvemos en
un ambiente de inconformidades y no tenemos la autodeterminación de no
conectarnos con ese ambiente, terminaremos uniéndonos al colectivo que es
inconforme, si en cambio buscamos expandir nuestra fortaleza de ubicar el
ambiente ideal para desarrollarnos seguramente veremos de manera sorpresiva
grandes y notables resultados. Queridos y apreciados lectores, en nosotros está
la decisión de elegir si hacemos de nuestra vida lo que deseamos o simplemente
seguimos el guion que otra persona pensó que deberíamos asumir. Asumamos el
control de nuestro ser y vivamos en ese equilibrio emocional que nos fortalece
el espíritu y el alma, llenando de alegría y satisfacción el estar en contacto
con esa naturaleza que decidimos adoptar. Es importante entender que hay
situaciones que ciertamente afectan a personas que de alguna manera crearon las
condiciones para ser parte de ese ambiente. No olvidemos que somos seres de
movimiento, pues sencillamente si nos quedamos estacionario en aquel lugar que
nos es incomodos fue porque así lo decidimos, si vemos que una silla tiene un
sucio o está defectuosa, sabemos que nos afectará sentamos en ella. Lógicamente
buscaremos solucionar aquello evitando ser afectado al sentarnos en ella, así
debe ser nuestro accionar ante aquellas cosas que no son de nuestro agrado,
pues problemas como la silla siempre habrán, sólo que ellas vendrán representadas
con distintas tonalidades, algunas económicas, otras laborales, al igual que
aquellas relacionadas a la familia, amistades y cualquier otro índole, estemos
donde estemos siempre se nos presentará esa silla que sabemos no es la adecuada
y si decidimos sentarnos en ella fue nuestra elección de recibir de ella
aquello que sabíamos nos afectaría. Por ello lo importante de ayudarnos a salir
de esa energía pesada y negativa de vivir en la queja, en la rabia, en la desesperación,
en la frustración. Si realmente deseamos hacer grandes cambios en nuestra vida,
cambiemos la manera de ver y busquemos actuar creando oportunidades donde otros
ven dificultades, creando alternativas positivas donde otros decidieron
estancar sus vidas, movilizar y desarrollar nuestros deseos donde otros no ven
más que nubes oscuras. En fin es nuestra vida, es nuestro momento y es nuestra
verdad la que debe imperar.
Héctor
Baptista, Facilitador de Pensamientos Reforzadores de Vida, Practicante del
Círculo de Realización Personal (CRP) en instagram por @mensajes_del_corazon_hb
Asesorías y Orientaciones a través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com
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