ENTRE
GUSTOS Y SABORES
Solemos asociarnos o
buscar estar vinculados a esas personas o ambientes que son afines a nuestros
gustos, pues en nuestra naturaleza humana buscamos estar en todo momento en esa
área confortable, agradable, tranquila, segura, que nos genere internamente aquel
ambiente emocional que nos haga sentir cómodos. “Me gustó al principio, pero
luego algo me dijo que no era”, “Tenemos cosas comunes, sin embargo en lo
primordial para mí no”. Generalmente solemos estar en esa exploración
comparativa a nuestro patrón de valores y gustos de manera inconsciente, es por
ello que solemos inicialmente sentir interés en conocer algo o alguien y luego
al tener ese contacto o el Intercambio inicial, según el caso es posible sentir
que algo en ese primer acercamiento causó ruido y desde ese instante comenzamos
a ser más detallistas en esa evaluación referencial con nuestro patrón de
valores. “Esa fruta se veía apetitosa, pero al probarla no sabía cómo
pensé". Quedará de parte de quien pruebe ese primer bocado intentar volver
a degustar de aquella fruta, ya con otro nivel de evaluación, pues al inicio
sin darse cuenta mostró tener expectativas. En esta segunda oportunidad se
permitirá apreciar aquel sabor diferente y decidirá si acepta ese nuevo
elemento en la lista de sus gustos. Queridos y apreciados lectores, es común
percibir inicialmente que algo o alguien nos atrae, pues mantenemos de forma
permanente activados nuestros sentidos, valorando y apreciando de manera
referencial todo lo que a su manera captó nuestra atención, pero igual puede
ocurrir que seamos vistos como esa fruta provocativa y deseen igual saber cómo
somos y allí nos corresponderá permitir y permitirnos ser degustados. Es
posible que al principio nos parezca diferente y novedoso lo que tenemos frente
a nuestra vida, es posible que nos guste a primera vista, es posible igual que
al principio no exista algo que nos atraiga, sin embargo para saber habrá que
probar y permitir que nos prueben, luego decidir si nos gusta verdaderamente y
estamos dispuestos aceptar ser esa fruta permitiendo que descubran nuestra
esencia o buscar seguir disfrutando de aquella que nos gustó. Lo que sí es
importante es definir ese gusto y aceptar o no aquel sabor, siendo honestos con
nosotros. Pues también hay quienes a pesar que no le gusta lo que probó, lo
sigue aceptando para no hacer daño a quien
con amor y buena voluntad quiso ofrecer y compartir su ser, pues con
ello hacemos y nos hacemos más daño.
Héctor Baptista,
Facilitador para crear Pensamientos Reforzadores de Vida. Sígueme por Instagram
y Facebook a través de @mensajesdelcorazonhb Asesorías y Orientaciones a
través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com
Comentarios
Publicar un comentario