VIVO EN MI NATURALEZA DE CRECER FELIZ

Si me preguntan qué etapa humana me gusta más, sin temor le respondo “La niñez” esa en donde no limitamos nada en nuestras vidas, donde asumíamos sin temores, ni dudas de nuestras capacidades, de ir por lo que creíamos, en donde expresábamos libremente lo que nuestro ser nos impulsaba a compartir, sin prestarle atención si aquello le gustaba o no a otra persona, inclusive vivíamos de una forma tan real aquellos sueños mágicos, que sentíamos que ya eran parte de nosotros. Entonces mi pregunta a mis lectores de hoy es ¿Verdaderamente confiamos en nosotros? Las personas exitosas tiene una característica común que a pesar de incursionar sus proyectos en diferentes áreas, resulta que cada uno de ellos creyó sin limitar nada en sus proyectos, sin poner barreras, ni limites a esos sueños que les impulsaron a visualizar desde lo más profundo de sus pensamientos aquello que nacía de forma natural en su ser. si algo realmente vale la pena mantener en la travesía de los años vividos, es nunca dejar a un lado a ese niño, soñador, alegre, optimista, entusiasta, arriesgado, valiente, sensible, humano, que nos regaló parte de nuestros mejores años de vida. Queridos y apreciados lectores, sabemos que ningún árbol, crece y da fruto, si él antes no consolida sus raíces en un lugar sólido, que le permita además nutrirse de los distintos elementos que requerirá para fortalecer cada parte de su estructura. Si logramos fijarnos en las riquezas que nos brinda la naturaleza, podríamos realmente acoplarnos a ella como parte del sistema. Somos seres maravillosos y mágicos, que indistintamente de nuestra forma de pensar y creer estamos conectados a esa fuente que está presente en todo lo que nos rodea. Así como vivimos, sentimos y de esa manera finalmente nos entregamos al universo. Toda Historia se inicia con la fuerza mágica de nuestra manera de proyectarla. No existen fantasías cuando creemos en nuestra mágica manera de ver la vida, pues todo es posible y todo se puede. Los límites los creamos nosotros. Sabemos que disfrutar la vida es la suma constante de instantes que moldeamos a nuestro gusto, con el propósito de recibir de ellos aquellos momentos inolvidables que le darán un sentido más hermoso a nuestra fortuna de ser los creadores de nuestros deseos. Hoy tenemos en nuestras manos la oportunidad de apreciar nuestros próximos instantes de vida o simplemente seguir en la monotonía que no nos permitirá apreciar lo bello que está allí frente a nuestro ser, recordemos que no hay Ave más feliz que aquella que tiene la libertad de volar donde desea, sin embargo lamentablemente hay quienes no corren con la misma suerte y entran un mundo de jaulas, donde se limitan a sólo ver pasar sus días sin sentido y soñando con estar fuera. Por ello lo importante de valorar el mágico y bello ser que somos, manteniendo nuestra firmeza en decidir ser libres en ir tras nuestros deseos naturales de vida. En nosotros está el crear el ambiente que buscamos sentir y vivir. Por ello lo importante de dibujar con el corazón ese ambiente que nos hace volar de alegría como cuando éramos niños y encontrar ese lugar donde nos sentimos realmente en casa. Si queremos cambios positivos, primeramente debemos iniciar confiando en nuestras capacidades e ideas, pues es la única manera que podamos hacer realidad nuestros más bellos sueños de brillar y crecer feliz.

Héctor Baptista, Facilitador para crear Pensamientos Reforzadores de Vida. Practicante del Círculo de Realización Personal (CRP). Sígueme por Instagram y Facebook a través de @mensajesdelcorazonhb Asesorías y Orientaciones a través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com