"EL PESO DE SER INFIEL"

"Si juegas con fuego, terminarás quemándote", una expresión muy descriptiva, para ejemplarizar que si actuamos mal, al final no irá mal. La infidelidad, más allá de ser una conducta que denota inseguridad, así como falta de personalidad y poca valoración al ser humano, evidencia que la persona que concurre en esta debilidad de personalidad, un trauma psicológico, que son adquiridos en la mayoría de los casos, por factores de rechazo, conflictos familiares, falsas culturas asociadas a la galantería, así como el intento de presumir ante otros un potencial sexual y de conquista. En fin, su conducta errónea en algún momento de su vida, le pasará la factura y en ese instante de vida, tendrá que asumir el peso de sus acciones, materializado en el rechazo y la soledad, que finalmente será su verdadera compañera hasta el final de los tiempos. Por lo general son los hombres a quienes identificamos como los infieles, sin embargo el tema es totalmente compartido con el genero femenino, dado a que igual existen personas que están cual cazador al asecho, de personas que muestren su debilidad a través de su inseguridad en relación a la pareja y no dudan en lanzar su señuelo para atrapar y romper aquella relación que mostraba un posible futuro. Es por ello la importancia de poder entender e identificar que cuando unas de las partes de la relación es infiel, la causante de esa traición comparte por igual el peso del desprecio, dado a que maquinó a su conveniencia convertir al traidor en su trofeo personal. Queridos y apreciados lectores, Sé que es un tema delicado y no grato, pero es necesario verlo con el mensaje que siempre nos trae el efecto de una traición, en donde sin duda con ello se cae todo pensamiento, sueño, así como la base fundamental de toda relación ”La confianza". Pero debemos entender que en nosotros recae parte de la responsabilidad, dado a que de alguna manera promovimos eso, pues solemos cerrar los ojos para aferrarnos a un amor y no le préstamos atención a las señales que los traidores suelen mostrar. Ellos siempre andan temerosos y pendientes de que nos descuidemos para así desviar su atención a un nuevo objetivo en su enferma cacería. Así que no debemos culparnos si nos toca ser parte de los traicionados, pues quien no valoró fue aquella persona que ya forma parte del ayer y que le dimos salida para limpiar nuestro honor y respeto. Aprender de esas caídas es importante y no dejar de confiar en otros, pues tu verdadero amor seguramente necesitaba que salieras de ese falso engaño para tener ella la oportunidad de conocerte y compartir ese regalo de vida que en base al respeto, confianza y admiración, para poder valorar y permitirnos vivir en amor.

Héctor Baptista, Facilitador para crear Pensamientos Reforzadores de Vida. Sígueme por Instagram y Facebook a través de @mensajesdelcorazonhb Asesorías y Orientaciones a través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com