DEPENDO
DE MI
Limitarnos
a esconder nuestro sentir en aquel caparazón, con la simple creencia
de no alterar la voluntad de esa persona que constantemente orienta
sus intenciones en dominar nuestra personalidad, es negarnos el poder
saborear la libertad de vivir en felicidad. Así que soltemos la
dependencia, pues a veces nos aferramos a algo o alguien por aquellos
caprichos personales, que terminan lastimándonos. Es por ello que
debemos primeramente salir de aquella coraza que creamos para
intentar engañarnos al pensar que haciendo lo que nos dicen, será
finalmente lo mejor para nosotros, pues si queremos realmente salir a
flote y mostrarnos tal y cual somos, no dudemos de asumir con valor y
determinación aquellas acciones que contribuyan a liberarnos de la
dependencia y hasta el apego de otras personas. Queridos y apreciados
lectores, cambiemos aquel mal habito de buscar depender de terceros y
comencemos desde la valoración personal, a dejar fluir y darle paso
a todo lo que finalmente no contribuya a nuestro crecimiento
personal. Recordemos el tiempo pasa y cada día que nos apegamos o
hacemos la voluntad de otra persona, es un día menos que tenemos
para realmente brindarnos la libertad de vivir a plenitud como
deseamos. Recordemos que somos seres independientes, que diseñamos y
edificamos nuestro propio canino. Nunca dejemos de perseguir nuestros
sueños, esos que debemos defenderlos fervientemente, sin permitir
que nadie intente moldearlos a su voluntad, ni limitarnos a
proyectarnos en él. Somos nosotros el mejor termómetro para medir
temperatura de nuestros logros personales. Tenemos la libertad de
buscar a través de un sueño la manera de convertirlos en deseos,
esos que nos impulsen a buscar la manera de cómo hacerlo y para qué
lo requerimos, solo salí podemos recibir con emoción la alegría de
sentir que materializamos aquello que en una oportunidad fue una
simple idea personal. El amor entra por casa, así que para poder
estar listo o lista para recibir lo que deseamos, debemos amarnos
internamente y valorar
lo valioso que somos, pues la practica diaria de ello, nos permitirá
descubrir nuestras fortalezas, lo que se traducirá en seguridad, que
sin duda alguna nos aportará esa felicidad y sabiduría necesaria
para salir de los amarres que no nos permiten volar con libertad. El
gran reto de la vida consiste en superar nuestros propios límites,
esos que nos mantienen arrinconados en el temor de asumir nuevos
caminos, pues al superar esa mental limitación veremos que todo es
posible, que el mundo tiene grandes oportunidades para nosotros, sólo
hacía falta confiar en nosotros y visualizar y actuar positivamente
ante aquello que nos establecimos alcanzar y superar.
*Héctor
Baptista*, Facilitador para crear Pensamientos Reforzadores de Vida.
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