SOY DE AQUÍ, PUES NACÍ EN LA TIERRA

“Y de pronto amaneció y en el despertar del nuevo día, encontré un hermoso motivo para tallar con acciones de amor el camino de una felicidad que decidí regalarme”. Somos tripulantes de un planeta, que generosamente nos permite residir bajo su abrigo y morada, obsequiándonos sin interés todos sus tesoros, demostrándonos que su amor no tiene condiciones y que indiferentemente como le tratemos siempre dará lo mejor de sí para nosotros a través de su amor incondicional. Nacer, de allí se inicia todo, el nacimiento de un día, de un nuevo proyecto, de una vida, de una relación, todo nacimiento, trae consigo el despertar de lo nuevo, que inspira motivos para seguir sumando alegrías a ese especial motivo que tenemos. Es allí donde debe nacer ese agradecimiento a Dios por la vida y los paisajes que a diario nos regala, agradecer además aquellas personas que son parte importante del sol de nuestra existencia. Llenar nuestro entorno de esa mágica energía que nos impulsa día a día a disfrutar de cada amanecer, es realmente maravilloso y aún más si valoramos el premio de vida de ser protagonista del hoy. Dependerá de nosotros si realmente deseamos darle bonitos colores al paisaje de nuestra vida, no olvidemos que somos ese presente perfecto, que logró superar las adversidades del pasado y con ello aseguramos un futuro prometedor y hermoso, que diseñamos a nuestro gusto para crecer y vivir feliz. Queridos y apreciados lectores, al darle la bienvenida a ese nuevo amanecer que tenemos la bendición de recibir con amor en nuestra vida, busquemos condicionar nuestro ser a establecer ese contacto con lo natural, junto a los elementos que nos regala nuestro bello planeta, esos que nos permiten llenar de vida nuestro ser. Respiraremos y sintamos el sonido de esos elementos, así como apreciemos el valor de contemplar aquellos hermosos paisajes, que nos impulsan a diseñar dentro de la mágica y hermosa inspiración de nuestros sueños, a seguir por la senda de la buena energía, que finalmente nos impulsará a proyectarnos desde la conexión con nuestro ser, permitiéndonos vivir y alcanzar nuevos horizontes, en donde prevalezca la humanidad, el amor y lo más importante, los valores humanos, necesarios para disfrutar de la vida, permitiendo que otros también disfruten de ella. Donde finalmente logremos ver desde la conexión con nuestra vibrante energía el fluir de esa radiante sonrisa que nació en nosotros al conectarnos a través de nuestros sentidos con aquello que disfrutamos. No olvidemos que somos tripulantes de un mundo que nos une de forma invisible, donde lo que afecte a uno, al final nos afectarán a todos. Es el momento de valorar, agradecer y querer a nuestra hermosa Nave Azul que hoy nos sigue regalando la posibilidad de disfrutar de sus infinitos encantos y bellezas naturales, detengámonos así sea cinco minutos de aquellas cosas de nuestra cotidianidad y regalémonos un bello instante para respirar, observa y percibir lo bello de aquello que nos rodea de forma natural, seguramente encontraremos en ese instante elementos que Nos Gustarán y nos harán muy feliz.

Héctor Baptista, Facilitador de Pensamientos Reforzadores de Vida, Practicante del Círculo de Realización Personal (CRP) en instagram por @mensajes_del_corazon_hb 

Asesorías y Orientaciones a través del email:cuandohablaelamor1@gmail.com