LA FORTALEZA DE
CONFIAR
"Cuenta conmigo". Una
manera de hacerle entender a esa persona que depositamos nuestra confianza en
ella. En la cotidianidad de las actividades que como seres humanos
desarrollamos, tendremos que depositar nuestra confianza en diversas
oportunidades a esa persona que complementará o que requeriremos para poder
concretar y materializar alguna de nuestras metas de vida. A nivel de amistad,
en las relaciones afectivas y aquellas actividades laborales será fundamental
confiar en aquellos seres que interactuarán en nuestros procesos, así como igual
requeriremos que confíen en nosotros para actuar con la libertad y seguridad
que ameritaremos para sustentar el aporte que estaremos otorgando con nuestras
acciones. Queridos y apreciados lectores, a pesar de que pareciera sencillo
lograr identificar o conceptualizar la palabra “Confianza”, resulta ser mucho
más complejo lograr sentirnos identificado con lo que en el fondo demandará
confiar y que confíen en nosotros, dado a que ello estará asociado a la
esperanza, la creencias, la amistad, el deseo e inclusive el arriesgar, sólo
para poder avanzar al siguiente nivel. Desde niños aprendemos empíricamente, el
depositar nuestra confianza en otro ser humano y esa acción según la respuesta
que recibamos, nos brindará la seguridad de conferir nuestro bienestar personal
a otra persona que tendrá en sus acciones nuestro porvenir. Bien sabemos que de
ello dependerá nuestro desarrollo en la cotidianidad de nuestras vidas, pues si
crecemos con la inseguridad de no tener la certeza de confiar en otra persona,
difícilmente podremos tener una vida estable y prospera. En este sentido
debemos ir afinando nuestros pensamientos y sentidos de manera de ser
evaluadores y analíticos permanentes de los ambientes en donde nos desenvolveremos,
con el propósito de poder intuir que en esa persona a la cual requeriremos
depositar nuestra fragilidad emocional, física, moral, laboral y hasta
particular, logrará brindarnos la sustentabilidad que requeriremos para poder
consolidar las bases que nos permitan seguir delante en aquellos proyectos
personales que tanto deseamos. Recordemos que siempre tendremos la oportunidad
de ser honestos, sinceros, leales y ejemplares para quien nos brinde su
seguridad de confiar en nosotros, así que ante tan importante galardón, debemos
actuar con rectitud, de manera de corroborar con nuestras hechos que somos
personas en las cuales se puede confiar y en quien se puede apoyar quien
requiera de nuestro aporte en aquella situación personal. Volvamos al ejemplo
de aquel niño que desea aprender a caminar y que confía en las manos de aquel
adulto que le extiende sus manos para que de aquél paso inicial, tenga la
confianza de dar otro que le brinde la seguridad de seguir adelante, pues
sabemos que si extendemos la mano y luego la quitamos, sembraremos en aquél
niño la inseguridad de poder confiar y desde entonces vivirá con la duda que le
mantendrá obligado a buscar sujetarse de algo sólido para poder ir
temerosamente avanzando a donde desea. Así que la moraleja de este escrito
sencillamente estará en extender con seguridad nuestra mano para que sirva de
sustento a quien amerite de nuestro apoyo.
Héctor Baptista, Facilitador
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